Descripción
BUPREX® suspensión pediátrica y BUPREX gotas están fundamentalmente indicados como antipiréticos y para aliviar el dolor de origen periférico. Cefalea, traumatismos osteo-musculares, dolor postquirúrgico en intervenciones leves, como por ejemplo luego de curación de heridas, en la post episiotomía, en las odontalgias o en el dolor que sigue a la extracción de piezas dentales y para el alivio de los síntomas de la dismenorrea primaria.
Buprex es un analgésico opiáceo (narcótico) que está indicado en el tratamiento de los dolores moderados e intensos de cualquier etiología.
Son indicaciones comunes cefalea, dismenorrea, dolor causado por traumatismos de huesos, articulaciones o músculos; dolor postquirúrgico, dolor causado por enfermedades dentales o por extracción de piezas dentales; dolor y fiebre que acompaña a los procesos infecciosos, fiebre de cualquier origen, con excepción de la causada por el dengue.
Como con cualquier otro antiinflamatorio no esteroidal, existe riesgo de úlcera péptica y sangrado gastrointestinal, descompensación de hipertensión arterial, insuficiencia cardíaca o enfermedad de arterias coronarias, o enfermedad renal. En pacientes con alteraciones de la hemostasia o bajo tratamiento anticoagulante, ibuprofeno debe utilizarse con precaución.
Pediatría: La dosis usual de BUPREX® en niños es de 10 mg/kg/dosis, la cual se puede repetir hasta 3 o 4 veces al día si fuera necesario. La reducción de la fiebre en niños de 6 meses a 12 años de edad requiere ajustar la dosis considerando la temperatura basal. Si la temperatura basal es inferior a 39.2 °C la dosis recomendada es de 5 mg/kg; si la temperatura basal es superior a 39.2 °C la dosis recomendada es de 10 mg/kg de peso.
Embarazo: Categoría C. El ibuprofeno está contraindicado en el tercer trimestre, debido a los efectos conocidos de los AINEs en el sistema vascular fetal (cierre prematuro del conducto arterioso).
Lactancia: Ibuprofeno se excreta en cantidades mínimas por la leche materna, por lo tanto, no se recomienda su uso en las madres lactantes.
Pediatría: Se debe utilizar con precaución.
Geriatría: No se han demostrado diferencias farmacocinéticas con adultos de menor edad, sin embargo, se recomienda iniciar el tratamiento con dosis bajas y de ser necesario realizar reajustes de dosis.